ANIVERSARIO N° 54 AEROPUERTO ARTURO MERINO BENÍTEZ

Con la asistencia del Presidente de la República de la época, Eduardo Frei Montalva, un 9 de febrero de 1967, se inauguró el aeropuerto Pudahuel. Años más tarde, mediante el Decreto Ley N° 3.245, a contar del 19 de marzo de 1980, pasa a denominarse aeropuerto Arturo Merino Benítez (Ap. AMB), en honor al prócer y forjador de la aviación civil y militar en el país.

Más de 800 funcionarios aeronáuticos de distintas áreas operativas y administrativas integran la dotación del aeropuerto Arturo Merino Benítez, principal terminal aéreo del país, entregando un alto nivel de seguridad a las numerosas y diversas operaciones que ahí se realizan día a día durante todo el año.

Segú cifras de la Junta de Aeronáutica Civil (JAC) perteneciente al Ministerio de Transportes, durante el año 2020 en el aeropuerto AMB se realizaron un total de 84.170 operaciones aéreas (despegues y/o aterrizajes), un 51% menos que las operaciones del año 2019.

Actualmente, este aeropuerto -administrado por la DGAC-, está en pleno proceso de una gran ampliación y reestructuración que lo transformará en una moderna puerta de entrada y salida del país, posicionándolo como uno de los terminales aéreos más importante de Sudamérica.

Desde 1967 a la actualidad

Durante dos décadas, la infraestructura original se acomodó perfectamente a las necesidades del público. Sin embargo, un solo terminal era insuficiente para recibir a vuelos nacionales e internacionales, debido al incremento incesante de pasajeros y carga. Es por esto, que se ideó la construcción de un nuevo edificio que recibiera vuelos internacionales, dejando el ya existente sólo para tráfico nacional.

El 14 de febrero de 1994, bajo el gobierno del Presidente Patricio Aylwin Azócar, se inauguraron las modernas dependencias en las cuales se atenderían los vuelos Internacionales. Dicho edificio se dividió en tres pisos climatizados y equipados con todos los elementos para brindar el máximo de confort y seguridad para el creciente público. Con una superficie de 25.000 metros cuadrados y, capacitado para movilizar alrededor de 4 millones de pasajeros y 200 mil toneladas de carga al año.

Entre los adelantos que se implementaron en AMB en esa época, fue la modernización de ayudas visuales y Sistemas de Aterrizaje Instrumental (ILS) que permitió al principal terminal aéreo del país poder operar en categoría III A, es decir, que permitía aterrizar con 200 mts. de visibilidad y desapegar con 175 mts., dejando a nuestro país en un excelente nivel.

Debido al importante crecimiento y solidez económico que fue experimentando nuestro país y al incremento sostenido de pasajeros en relación a los de los años 90, el transporte aéreo se fue convirtiendo en uno de los recursos más utilizados por los chilenos, para movilizarse, tanto a nivel nacional como, con el resto del planeta.

En marzo de 1996 el Presidente de República, Eduardo Frei Ruiz Tagle, dio a conocer la nueva “Política Aeroportuaria”, que permitía la incorporación del sector privado al financiamiento, construcción y administración de los principales aeropuertos de chile. En virtud de esta política, y tras ganar la licitación, la Sociedad chilena, SCL Terminal Aéreo Santiago S.A., formada por empresas nacionales y extranjeras (AGUNSA, Chile; Dragados/FCC S.A., España; SABCO, Administración de Fondos S.A., IVR Airport Services, Canadá) comenzó en mayo de 1998 la ampliación y remodelación del aeropuerto AMB.

El 15 de diciembre de 1999 se inauguró la denominada etapa “Bravo”, significando un aumento  en la superficie de 25.500 a 58.700 metros cuadrados, donde se incluyó la construcción de una nueva Torre de Control de 65 metros de altura, equipada con la más moderna tecnología; el aumento de 4 a 10 puentes de embarque; Plataforma de estacionamiento de aeronaves de 75 mil metros cuadrados, aumento de superficie del terminal en 33.543 metros cuadrados, ampliación poniente del terminal internacional, mejoramiento de los estacionamientos de pasajeros, construcción de vialidad interna y nuevo edificio Terminal de carga, edificio del SAG, edificio de Aduana y edificio de la DGAC.

El 31 de mayo del 2001, se entregó la etapa denominada “Charlie” considerando un total de 90 mil metros cuadrados de superficie del terminal y 17 puentes de embarque aumentando el año 2010 a 18. Se contempló además, la ampliación de la única pista y la construcción de una segunda pista paralela a la actual, de 4 mil metros.

En el año 2005 se entregó la segunda pista del Ap. AMB equipada con moderna tecnología, además en la pista 17L se implementó el Sistema ILS Categoría III B, que permite aterrizajes y despegues con 50 metros de visibilidad.

El 21 de abril de 2015, el aeropuerto Arturo Merino Benítez fue adjudicado a Nuevo Pudahuel, un grupo formado por Groupe ADP (45%), VINCI Airports (40%) y Astaldi Concessioni (15%). Uno de los principales objetivos es aumentar la capacidad del año 2014 de 16 millones de pasajeros a 30 millones en 2020, con un potencial total de 45 millones.

Hoy luego de 54 años e innumerables cambios, han permitido a nuestro aeropuerto convertirse en uno de los más modernos de Latinoamérica y con una nueva Concesionaria, Nuevo Pudahuel.

Colaboración: John González, RRPP, Ap. Arturo Merino Benítez.





Última actualización: 6 de Abril de 2021